Amor: ¡es una lata, pero ah que bonito es!

Aaay el amor… ¿Que chinga no? Mientras unos lo buscan con  desesperación,  a otros les asusta y le huyen.  ¿Que si yo e estado enamorada? Si, solo una vez, y les confieso que no fui correspondida de la misma manera, pero aún así puedo decir que fue uno de los sentimientos más bonitos que han pasado por este corazoncito.

Les pláticare un poquito,  conocí a este amigo, por unas amigas en común; muy alto, guapo, apiñonado (así le decimos a los morenos/bronceados en Sonora),  total el era “mi tipo” y yo sabía que el yo era su super crush.  La bronca fue en el momento que hablamos, me cayo gordisimo, tan seguro de sí mismo que me resultaba desagradable, pero parte de mi quería conocerlo más.

Para no hacerles el cuento largo,  nos conocimos bastante bien, que terminamos saliendo, encontramos nuestros gustos en común y su compañía para mi era lo máximo.  Si, ya estaba perdidamente enamorada,  descubrí lados, facetas y humores de él que muy poca gente conoce, ya que es muy reservado y no los demuestra, y viceversa,  teníamos una “relación” bien padre, la única bronca era: ¡Que el no estaba enamorado!

La cruda realidad,  esque nosotros siempre sabemos cuando alguien no nos quiere de la misma manera,  solo que nos encaaaanta hacernos güeyes, y pensamos cosas bien estúpidas como: “de seguro se tarda 2 horas en contestar porque quiere hacerse del rogar” o “estaba con esa/ese para darme celos”.  Y la realidad es, que se tarda siglos en contestar porque no tiene tanto interés,  y si esta con otro u otra no es para darte celos,  es más ni por su cabeza paso esa intención.

Al amor no se le debe de buscar, porque lo bonito del amor es esa fluidez que tiene por naturaleza,  y no se le debe de huir porque eso es de inmaduros y cobardes que le tienen miedo a apostarle a la felicidad.  Al amor hay que dejarlo llegar, dejarlo fluir y ser valientes y apostarle.

Los dejo con una frase de una amiga que dice algo así: “Tu media naranja si existe, pero mientras llega, prueba otras frutas”

-María Laura

One thought on “Amor: ¡es una lata, pero ah que bonito es!

Leave a comment